Resumen
Está ampliamente aceptado que procesos tales como la pronominalización y la elipsis, caracterizados por la omisión anafórica de elementos, ayudan a reducir el grado de redundancia estructural en la comunicación. El hecho de que los hablantes se valgan de estos procesos para evitar que la información transmitida sea redundante, nos permite suponer que tales procesos, por tener una motivación pragmáticofuncional, podrían ser explicados más adecuadamente, si se tienen en cuenta en su descripción factores tales como lo que es informativamente 'nuevo' o 'conocido' (dado) para el hablante-oyente en el momento de la comunicación. En vista de lo anterior, argüiremos en este artículo que un análisis funcional resultará más adecuado que uno puramente sintáctico, cuando se describen fenómenos lingüísticos.