Resumen
Poco a poco se va adelantando la tarea de salvar del olvido las poesías del insigne José Asunción Silva. Fuente de una buena porción de los versos rescatados es una carterita copiada del manuscrito original por dos amigas del poeta, Paca Martín y María Manrique. El cuadernillo trasladado por las señoritas Martín y Manrique pasó luego al hermano de ésta, Pedro Carlos Manrique, quien permitió la publicación de algunos de los poemas desconocidos en la Revista Ilustrada en 1898.
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